Qué necesito para recibir un perro en casa

© Monica Lepe

Si decidiste adoptar o integrar un perro a tu familia, es importante que tomes en cuenta los siguientes puntos antes de recibirlo:

1) El lugar donde habitará el perro deberá estar acondicionado antes de su llegada, debe ser un lugar donde pueda estar fresco de día sin los rayos del sol y calientito de noche. Debe incluir un lugar asignado para él con unas cobijas o toallas viejas, una cama, una casa o un kennel (transportadora).

La cama, la casa o el kennel los puedes adquirir en veterinarias o tiendas de autoservicio, donde también venden colchonetas individuales muy económicas y de colores divertidos. Te recordamos que los primeros días deberás enseñarle donde sí y donde no debe de hacer del baño.

2) Tener platos para agua y croquetas, collar con placa de identificación y correa, juguetes adecuados para su tamaño y edad y/o carnazas para ejercitar dentaduras y evitar que destruya zapatos y objetos.
La placa es indispensable, recuerda poner la leyenda de esterilizado al final y un par de teléfonos celulares. No pongas tu dirección o nombre para evitar estafas. Tu perro NUNCA debe estar sin placa.
Existen varios estilos de collares, los venden en veterinarias. La correa te recomendamos sea resistente, ligera y que no se enrede ni se oxide como las de cadena. Sobre el collar hay algunos que son de un material como el que utilizan los alpinistas, se moja y no le pasa nada, al igual que tienen un broche de plástico muy seguro para evitar que se abra. Algunos tienen broches de aseguramiento y otros tienen sistemas para evitar que con los jalones de la correa se venza el broche, prefiere estos si tu perro jala al pasear. No recomendamos los que parecen cinturones, se abren fácilmente y puede llegar a tirarlo sin que te des cuenta.
Si tu perro jala y no puedes conseguir un collar con broche de aseguramiento, entonces utiliza otro collar para pasearlo, de manera que si llegara a vencerse el que lleva la correa y tu perro saliera huyendo, mantenga el que trae la placa de identificación. Esto asegurará su regreso a casa, sano y salvo.

3) La frecuencia y cantidad de comida se determinarán de acuerdo al tipo de alimento, peso y edad del animal. En caso de duda, puede consultar a su veterinario de confianza. Los platos se consiguen en veterinarias o en tiendas departamentales. Los mejores son los de acero inoxidable y de buen tamaño.

El agua debe estar siempre fresca, limpia y en la sombra, el recipiente debe ser de tamaño grande, los perros beben mucha agua.

4) Entender que el animal se encontrará un poco deprimido por el cambio de hábitos y personas que le cuidan, lo cual puede afectar su cantidad de actividad y su actitud, pero será temporal. Puede llorar durante un par de días. La clave es brindar ejercicio, mucho afecto, atención y rutinas de juegos, alimentación y atención. Recuerda que tu perro y tú necesitan tiempo y paciencia para adaptarse el uno al otro y al estilo de vida de su nuevo hogar. Esto incluye espacios, horarios, ruidos y olores, así como acostumbrarse al resto de los integrantes humanos y no humanos del nuevo hogar. En los horarios que lo dejes solo, debe contar con juguetes, carnazas o premios para que no se aburra y se ponga ansioso.

5) Mantener durante los primeros 30 días cuidados extremos al entrar o salir de la casa para evitar la fuga del animal.
Recuerda que en cualquier descuido pueden extraviarse y es mejor prever que lamentar. Es importante NO escatimar en esto, ya que llegan a la asociación todos los días llamadas de extravío y casi siempre por un descuido humano. El resto es por robo.
Recuerda enmallar tu reja de entrada si el perro cabe entre los barrotes, hay opciones muy económicas, pero evita la malla para pollos, pues es demasiado débil.

6) Tu perro es un animal doméstico y casero. No lo dejes salir solo NUNCA a la calle, áreas comunes de condominios, edificio. JAMÁS debe pasear solo y/o sin correa. Esto le evitará peleas, extravíos, robo de su animal, atropellamientos, envenenamientos y la transmisión de enfermedades por contacto. Se recomienda extremo cuidado de lo que tome del piso para masticar y comer.

7) Desde el primer momento, comenzar a dejar muy claras las reglas de la casa. Cuando haga lo correcto, felicitarlo con palabras y voz amable llamándole por su nombre. Cuando desobedezca las reglas, decir un “NO” firme e indicarle o llevarlo a hacer lo correcto. JAMÁS SE LE CASTIGARÁ CON GOLPES, EMPUJONES, VIOLENCIA O ENCIERROS.

8) El rescatista siempre estará dispuesto a aclara dudas, orientar y guiarte durante el proceso de adaptación y durante toda la vida del animal. Su responsabilidad no termina con la adopción, sino que dura todo el tiempo que dure la vida del animal.

9) Visitar al médico veterinario por lo menos una vez al año, para aplicar vacunas y desparasitación de rutina. Ante cualquier cambio de hábitos de higiene, alimentación o síntoma que pueda indicar enfermedad, por favor, acudir al médico veterinario para su atención inmediata.

10) Recuerda que tu perro es como un niño y nunca podrá decirte qué le duele o necesita. Debes ser un padre responsable y sensible a todas las necesidades de su peludo compañero.

11) Tu perro necesita pasear y ejercitarse a diario. Lo ideal son dos caminatas diarias de una hora. Trata de ajustar sus horarios y tiempos para que puedas pasearlo por lo menos una vez al día. De preferencia antes que el sol esté fuerte, recuerda que los perros no sudan y se sobrecalientan con facilidad. Lleva una bolsa de plástico o papel y recoge sus excrementos. Esto ayuda a mantener las calles limpias y no tener problemas con los vecinos. Recuerda que el aire que todos respiramos se contamina con los excrementos que se secan, pulverizan y vuelan en el aire.
El ejercicio les ayuda a controlar el peso y su salud, además de que esto les evita estrés, ansiedad y depresión. Asimismo, les ayuda a formar vínculos afectivos con sus dueños. Del paseo se obtiene un perro mentalmente equilibrado, tranquilo y evitarás aullidos, el hecho de que rompa cosas, presente agresividad, inseguridad y que se trabaje el área social con otros perros y personas, vital para estar mentalmente equilibrado.

12) Cepíllalo con regularidad, un cepillo suave brindará un agradable masaje que ayudará a tener su pelo limpio y libre de nudos. Lo ideal es cepillar después de las caminatas. Estrechará los lazos afectivos entre ustedes.

13) El baño es importante, debe bañarse cada quince días como máximo y cada mes como mínimo. Usar un jabón/shampoo especial para perros o shampoo de bebé diluido en agua a partes iguales. Enjuagar y secar muy bien. Evitar el uso de secadora, salvo en ocasiones de extrema necesidad. La secadora de pelo debe usarse con mucho cuidado, a temperatura baja y a distancia de 50 cm. mínimo de la piel del animal para evitar quemaduras.

14) Se recomienda comprar una transportadora y siempre que viaje en carro acostumbrarlo a ella. Es una inversión que durará toda la vida del animal.

15) Los perros son animales gregarios que viven en “manadas”. Sufren de soledad y pueden volverse neuróticos. Si no puedes brindarle tiempo, atención y cuidados, será mejor que reconsideres la idea de adoptar o adquirir un perro.

16) Ante la imposibilidad de conservarlo, favor de contactar al rescatista de inmediato.

Información redactada para Adopta Guadalajara por
Cristina Ruíz Gaytán
Justicia y Dignidad Animal A.C.